Hace ya un tiempo que en mi otro blog comentaba otra de las miserias de la caza de ballenas: el contrabando de carne de estos animales entre los trabajadores. Parece ser que una vez denunciado el asunto, no importa tanto lo que se denuncia sino cómo se ha investigado. Espero que tanto con el vídeo inicial que he dejado enlazado, en inglés, tanto como por el que tenéis aquí abajo, podáis sacar vuestras propias conclusiones.
Ahora, si queréis exigir la liberación de los activistas de Greenpeace que desmantelaron el asunto, pinchad aquí.
Dedicado a Gaia 3.0 
🙂 Hola Perico, fa temps que llegeixo el blog però mai no havia ficat res a aquest nou 2.0.
Jo a més de Greenpeace també estic a virtualment a WWF.
Saludets i gràcies per mantindre’ns informats.
Saludets
Lo primer és donar-te la benvinguda i lo segon que mantindre-vos informats és un plaer alhora que un necessitat.
Bona nit i gràcies de nou per recol-zar la causa.
P.D. Traducción al castellano para los foráneos:
Lo primero es darte la bienvenida y lo segundo que manteneos informados es un placer a la vez que una necesidad.
Buenas noches y gracias de nuevo por apoyar la causa.
Listo, Perico, firmado.
Mientras ciertas cosas como esta sean lucrativas… no, no es vaso medio vacío, es lo que hay y ojalá las firmas sirvan para algo ^^
A ver si un día investigamos el tema del atún rojo, porque hay que ver cómo se pesca!!!
Un abrazo
Ahora sí que me ha llegado un correo avisando de tu comentario 🙂 Lo del atún es un escándalo, pero al ser un producto, de momento, tan habitual, cuando a la gente le cuentas que se está pescando cuatro veces por encima del nivel sostenible, te miran como si estuvieras chalao. Me consta que en Europa ya se ha dado la voz de alarma, pero la cosa pinta mal, hay una pescadilla que se muerde la cola: Consumidores poco informados, implicados y exigentes. Una flota que está por encima de la capacidad de los océanos y que los políticos no saben qué hacer con ella. Complicado, por no decir negro, está el panorama.
Aunque suene a coña, de momento, la salvación de muchas cosas pasa por hacernos como mínimo vegetarianos o casi vegetarianos. Ya no es una cuestión de consumir en la medida de lo razonable, es una cuestión de que somos muchos consumiendo más rápido de lo que se repone; cuestiones filosóficas aparte sobre si nuestro antropocentrismo hace tratar al resto de formas de vida como meros objetos con los que comerciar. Allá cada cual.
Bona nit maja.
Y por supuesto, un abrazo va para allá 😉
Os dejo información reciente al respecto: pinchad aquí